martes, 17 de marzo de 2015

NO SÉ VIVIR

Me acostumbré
a amarte tanto
que me fue creciendo
un amor de arrastre
enfermo de raíz
incomprensible.

De esos amores
sin noción del diccionario
del sí o el no
ni del tiempo…
sin explicación normal.

Y te entregué…
mi estatura desde el piso
mi peso de cero a cien
mi andar
mi cabello y su tinte

mi aliento
mi soñadora voz.

Y no tengo nada…
ni un pedacito de mi corazón
porque te di también
mis piezas rotas.

¿Y qué hago? 
Si no logro equilibrarme
no sé qué hacer…
si en la ausencia de mi cruz
no sé vivir.
















No hay comentarios:

Publicar un comentario