Respiro de ti en cada
bocanada que inunda mis alveolares espacios. Porque soy tuya. Porque esculpiste
a tu antojo mi piel moldeándola como obra de arte al contorno de tus manos, tu boca
voraz e insaciable de placer y tu lengua en recorrido interminable por mis
recodos y grietas… absorbiendo mis humedades para calmar tu sed, dibujándome estrellas,
soles y lunas. Te respiro, sí. Y me bebo en cada respiro el sabor de tu mar
gota a gota.
Dora Elia.
2 de Mayo 2016.
EE.UU.
Derechos reservados de
autor.
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