miércoles, 20 de julio de 2016

LECHO DE PÉTALOS



Y entre el cielo y la tierra
solo existía un deseo.
Un propósito.
El tuyo.
El mío.
De andarnos la piel
a punta de cañón
a palmo de locura
a golpe de caricia…
desde el verde mar
hasta la bóveda celeste.
Y después…
después
de entrelazar las manos
llevando a cuestas tu boca.
Tus labios labrando ansias
en mi espalda…
mustias enmudecieron
las esquinas de la habitación.
Las paredes gemían.
Sudaban ajetreadas las sábanas.
Las gotas de vino corrieron
sucesiva
paulatinamente
entre baños carmesí
-como yo y mi lentejuela-
de mi cabello
a mis muslos…
embriagando tu lobo.
Al fondo del éxtasis
un violín y una guitarra
iban y venían.   
Hablaba el incienso.
Velas escurrían de calor.
El lecho de pétalos
acomodado a mi cuerpo
me dibujaba de tul…
y yo
yo moldeé a ti mis alas.

Dora Elia
20 de Julio 2016.
EE.UU.
Derechos reservados de autor.














No hay comentarios:

Publicar un comentario