lunes, 20 de noviembre de 2017

UNA CARTA Y UNOS VERSOS.

                                                     
Discurre la tinta,
sin rumbo por un momento.
Busca dónde empezar,
locamente lo desea,
como las mañanas somnolientas
que piden a gritos un café.

La incita algo especial.
Siente premura,
debe apresurarse
y formar las palabras precisas
hasta vaciar su emoción.

Una hoja de espalda a espalda,
dos páginas escritas,
símbolo de ellos.
Empieza a nacer una carta
y unos versos que la mueven,
que fluyen como colmenares.

Hoy llega su amor,
el que la alimenta de fantasías.
Hoy es derroche
hasta romperse las estrellas.

Quiere regalársele,
sin omitir palabra
que pudiera ser la cereza,
roja e incitante,
para ser mordida
al momento que el tiempo se detiene.

Y la tinta lleva prisa,
escribe,
escribe
y escribe.

Va tomando figura esa carta
y unos versos para él,
que se derraman
desde el borde de su elocuencia.

Esta noche viene su amor a arrullarla,
leyéndola,
hasta quedarse abrazados durmiendo,
soñando escribir otro poema
cuando se levante el sol.

Dora Elia.
20 de Noviembre 2017.
EE.UU.
Derechos de autor.  



1 comentario:

  1. Muy bonito tu poema, Dora. Muy romántico.

    Me gustó.

    Que tengas un gran día.

    ***

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