No sé qué es más gris...
si el cielo o mi respiración
reventando quimeras
cuando tu no estás.
Me muevo autómata
en el mutilado espacio
donde yacíamos juntos...
hasta el momento
que tocaba el timbre
cruel de tu partir.
Me enjabono el recuerdo
tallándome la espalda
arrastrando mis manos
con desgano enfermizo.
La ducha no tiene el mismo sabor
si no es contigo
está confundida
en desatino profundo.
Y le robo sus colores al pavo real
y me visto de ellos alegre
esperando busques pronto
un colorido viaje al cielo
para volar entre mis brazos
y me llegues flotando
aunque sea en una nube...
una nube de mis sueños.
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